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Early Childhood Research & Practice is in the process of moving to the early childhood special education program at Loyola University Chicago after 17 years at the University of Illinois at Urbana-Champaign. We are delighted by the opportunity to “pass the torch” to our Loyola early childhood colleagues. More details are forthcoming, but until then we are not accepting submissions to the journal.

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Vol. 14 No. 2
©Derechos de autor reservados 2012

Desarrollo y evaluación de un juego integrado de herramientas para el control de plagas para proveedores de cuidado infantil

Abbey Alkon
Universidad de California, San Francisco

Evie Kalmar
Universidad de California, Berkeley

Victoria Leonard
Universidad de California, San Francisco

Mary Louise Flint
Universidad de California, Davis

Devina Kuo
Universidad de California, Berkeley

Nita Davidson
EPA California

Asa Bradman
Universidad de California, Berkeley

Sinopsis

Los niños pequeños y los empleados de cuidado y educación infantil (ECE, siglas en inglés) son expuestos a las pesticidas usadas para el control de plagas en instalaciones de ECE en los Estados Unidos y en otras partes. El objetivo del presente estudio piloto fue el de animar a los programas de cuidado infantil a reducir el uso de pesticidas y la exposición de los niños a las mismas, al desarrollar y evaluar un juego integrado de herramientas para el control de plagas (IPM, siglas en inglés) para proveedores de cuidado infantil y su personal. Un equipo multidisciplinario desarrolló un juego de herramientas IPM en inglés y en español para empleados de cuidado infantil, el cual incluía un folleto de currículo IPM, una lista de verificación IPM, 11 hojas de información específica a las plagas y cuatro carteles instructivos. El proyecto de intervención incluía entrevistas con gerentes, talleres educativos sobre las plagas y el IPM, una caja de herramientas IPM listos para usarse, una lista de verificación piloto con 72 elementos para evaluar problemas con plagas, y fotografías de problemas identificados. Se capacitó a 107 empleados de nueve centros de cuidado infantil que servían a 854 niños de diversos grupos étnicos. Se realizaron entrevistas con gerentes antes y después de la intervención, formularios de conocimiento IPM y evaluaciones con las listas de verificación IPM. Los resultados indicaron cambios positivos de políticas, consciencia, prácticas y administración de IPM, además de la prevalencia de problemas con plagas 4 a 6 meses después de la intervención. La lista de verificación IPM identificó mejoras en 34 de los 50 elementos (el 68%) y cambios positivos en la reducción de infestaciones de plagas (el 100%). Las entrevistas con gerentes revelaron experiencias positivas con IPM además de apoyo y satisfacción con el taller y juego de herramientas IPM. 

Introducción

Los niños pequeños que son expuestos a pesticidas en su ambiente están en peligro de problemas cognitivos, neuroconductuales, respiratorios y de desarrollo (Eskenazi et al., 2007; Guillette, Meza, Aquilar, Soto y Garcia, 1998; Makri, Goveia, Balbus y Parkin, 2004) debido a su inmadurez fisiológica (Bearer, 2000; Moya, Bearer y Etzel, 2004; Rauh et al., 2006) y sus comportamientos exploratorios de gatear, tocar y meterse a la boca objetos del ambiente. La exposición posible de los niños a pesticidas ambientales también se incrementa porque comen, respiran y toman más por unidad de peso corporal que los adultos y tienen áreas cutáneas superficiales relativamente grandes (American Academy of Pediatrics Committee on Environmental Health, 2003; Wigle, 2003).

En 2010, el 64% de los niños en los Estados Unidos menores de 5 años de edad pasaban un promedio de 36 horas a la semana en el cuidado infantil (National Association of Child Care Resource & Referral Agencies, 2010). Muchos de estos bebés y niños pequeños pasan hasta 10 horas al día y 5 días de la semana en el cuidado infantil, donde posiblemente se exponen a pesticidas (Tulve et al., 2006). Además de los niños, aproximadamente 2.3 millones de proveedores de cuidado infantil  (National Association of Child Care Resource & Referral Agencies, 2010) también pueden ser expuestos a pesticidas en programas de cuidado infantil; casi la mitad de ellos son de edad reproductiva, cuando la exposición a pesticidas puede ser más dañina (Bureau of Labor Statistics, 2010).

El primer sondeo nacional de la salud ambiental de centros de cuidado infantil de los Estados Unidos (U.S. National Environmental Health Survey of Childcare Centers) fue un estudio basado en la probabilidad que evaluó la exposición de niños al plomo, alérgenos y pesticidas en 168 centros autorizados de cuidado infantil en 48 estados (Tulve et al., 2006). El 63% de los participantes informaron de aplicaciones de pesticidas en los centros, el uso de las cuales variaba de 1 a 10 productos (medio (DT) = 3(1.9)) con una frecuencia de aplicaciones de pesticidas que variaba de 1 a 107 veces al año. Las pesticidas con piretroides y organofósforo (OP, siglas en inglés) fueron detectadas en el 80% de los centros. Otro estudio de 637 centros de cuidado infantil en California, seleccionados al azar (Bradman, Dobson y Leonard, 2010), halló que el 90% de los centros informó de al menos un problema con plagas, y el 55% de los centros informó de usar pesticidas, principalmente insecticidas; el 47% informó de usar aerosoles y nebulizadores, que dejan residuos en las superficies y el aire. Por el contrario, sólo el 21% informó de usar métodos de aplicar pesticidas menos riesgosos y concordantes con los principios del control integrado de plagas (IPM, de Integrated Pest Management en inglés), como por ejemplo los cebos y geles. En un estudio piloto de nueve centros en Carolina del Norte, se encontraron pesticidas de OP y piretroides en el aire y el polvo (Wilson, Chuang y Lyu, 2001), lo que sugiere que las exposiciones en ambientes de cuidado infantil pueden constituir una porción significativa de la exposición total de los niños a pesticidas de OP y piretroides.

Las normas nacionales de cumplimiento con la salud y seguridad en el cuidado infantil, desarrolladas por la American Academy of Pediatrics (Academia Americana de Pediatría), la American Public Health Association (Asociación Americana de Salud Pública) y el National Resource Center for Health and Safety in Child Care and Early Education (Centro Nacional de Recursos para la Salud y Seguridad en el Cuidado y Educación Infantil) (2011), estipulan que “las instalaciones deberían adoptar un programa integrado del control de plagas para asegurar la supresión a largo plazo y ambientalmente saludable mediante diversas prácticas, las cuales incluyen la exclusión de plagas, la sanitación y el control del desorden, y la eliminación de condiciones que contribuyen a las infestaciones de plagas” (pág. 226). Las normas incluyen recomendaciones para la prevención de plagas, el monitoreo de plagas, el uso de pesticidas, avisos, registros, el mantenimiento de archivos y el almacenaje de pesticidas. Sin embargo, no todos los estados tienen requisitos para licencias que incluyen estas normas nacionales. Las políticas del cuidado y educación infantil (ECE, siglas en inglés) de 21 estados incluyen el uso de IPM, de los cuales 15 estados lo requieren y 6 estados lo recomiendan (Owens, 2009). Los reglamentos de California para la autorización del cuidado infantil (http://www.dss.cahwnet.gov/ord/PG587.htm) requieren que los titulares de licencias mantengan sus centros libres de moscas, otros insectos y roedores (Regulation 101238) y que guarden su basura correctamente en recipientes que tienen tapas bien apretadas para prevenir oportunidades de la reproducción de plagas y evitar la provisión de fuentes alimenticias a insectos o roedores (Regulation 101239). Aunque ningún reglamento de licenciamiento incluye el uso de IPM para reducir el uso de pesticidas en centros de ECE, la Ley de Escuelas Saludables de California (Healthy Schools Act, 2000) anima a centros de cuidado infantil a implementar prácticas de IPM, requiere el aviso a padres y anuncios por escrito en el centro de las aplicaciones de pesticidas, además del requisito de llevar registros e informar del uso de pesticidas.

En tres estudios de proveedores de ECE, se mostró que muchos de ellos no conocían el IPM. En un sondeo en 2009 de directores de centros de cuidado infantil en California, sólo el 25% conocía el concepto de IPM, y la mayoría (el 63%) obtenía información sobre el control de plagas de compañías comerciales del control de plagas (Bradman et al., 2010). En otro sondeo de 3,364 centros de cuidado infantil en Illinois, el 18% no sabía del IPM (Mir, Finkelstein y Tulipano, 2010). En un estudio de 45 centros en la Cuidad de Nueva York, el 84% de los administradores de centros no sabía nada del IPM antes de iniciarse el proyecto de intervención (Anderson, Glynn y Enache, 2010).

Dos estudios de la intervención de IPM en programas de cuidado infantil indicaron efectos positivos de la instrucción, evaluación y documentación de IPM en las prácticas de IPM en el cuidado y educación infantil. En un estudio realizado por la Región 2 de la Agencia para la Protección del Medioambiente (EPA, o Environmental Protection Agency) de los Estados Unidos en 45 centros de cuidado infantil de Staten Island (Nueva York), se redujeron las aplicaciones regularmente programadas de pesticidas del 80% al 36%, y el número de centros que no aplicaban pesticidas se incrementó del 9% al 20% (Anderson et al., 2010). Otro logro notable es que el número de centros que adoptaban e implementaban prácticas de IPM se incrementó del 7% al principio al 80% después de la intervención, ya que o implementaban su propio plan de IPM o adoptaban o implementaban el plan de IPM de la compañía del control de plagas que les daba servicio.

Un programa Train-the-Trainer (Capacitar al capacitador) de IPM se llevó a cabo en Illinois con 892 programas de cuidado infantil autorizados, los cuales incluían centros y hogares familiares de cuidado (Mir et al., 2010). Este programa de capacitación en IPM incluyó una presentación con diapositivas, una sesión de preguntas y respuestas, y un manual y juego de herramientas de IPM (es decir, lana de acero, calafateo y una pistola para aplicarlo, trampas). Después de la capacitación en IPM, los empleados tenían más confianza en su conocimiento de IPM, usaron menos aerosoles de pesticida y usaron más trampas de monitoreo de roedores en comparación con los proveedores que no participaron en la capacitación en IPM.

A fin de tratar las lagunas en el conocimiento de proveedores de ECE respecto al IPM y la Ley de Escuelas Saludables de California, los autores desarrollaron y evaluaron un juego de herramientas de IPM para programas de cuidado y educación infantil. El presente artículo describe el desarrollo del juego de herramientas de IPM y los resultados del estudio de la evaluación, los cuales incluyen si la intervención exhaustiva de IPM (es decir, taller de IPM, juego de herramientas de IPM, entrevista con el gerente, evaluación con una lista de verificación de IPM) dirigida a los empleados y administradores de ECE cambiaba el conocimiento y las actitudes del personal de ECE en cuanto al IPM, las políticas escritas de IPM, las prácticas de prevención de IPM, el uso de pesticidas y la prevalencia de problemas con plagas.

Métodos

Desarrollo de un juego de herramientas de IPM

Nuestra meta fue la de desarrollar un juego de herramientas de IPM basado en evidencia, práctico, útil y escrito al nivel apropiado de lectoescritura para proveedores y administradores de cuidado infantil. Convocamos un equipo interdisciplinario administrativo de expertos de los campos de epidemiologia, entomología, enfermería, salud pública y ECE para desarrollar el bosquejo del juego de herramientas, mensajes claves y el contenido técnico de IPM. También convocamos un grupo consultivo de profesionales de ECE para repasar los materiales según su relevancia para la comunidad de cuidado infantil. Otros críticos más incluían proveedores de cuidado infantil, científicos ambientales, educadores de ECE y empleados con pericia en la salud ambiental que trabajaban en agencias sin fines de lucro y del gobierno.

La selección del contenido del juego de herramientas se basó en la investigación y los informes de IPM que se llevaron a cabo principalmente en escuelas primarias y secundarias públicas, y en una investigación más limitada de niños en programas de cuidado infantil (California Department of Pesticide Regulation, 2010; Fenske et al., 1990; Makri et al., 2004; University of California Statewide Integrated Pest Management Program, 2010; Wigle, 2003; Woodruff, Axelrad, Kyle, Nweke y Miller, 2003). El juego de herramientas de IPM se puso a una prueba piloto en dos centros de cuidado infantil para recoger observaciones de los empleados participantes en cuanto a los mensajes claves, el formato del taller, la relevancia para su trabajo e ideas para expandir tales partes del taller como el énfasis en lo dañino de las pesticidas para la salud de niños.

El juego de herramientas de IPM final incluía un manual de currículos de IPM, hojas de información específica a las plagas y escritas para proveedores y familias de ECE, carteles y una lista de verificación de IPM (Tablas 1a y 1b). Las hojas de información específica a las plagas fueron escogidas según los problemas con plagas más identificados en el sondeo realizado por Bradman et al. (2010) y consultas con nuestro equipo interdisciplinario de administración. Las hojas de información específica a las plagas sacaron mucho de la serie de publicaciones Pest Notes (Notas de plagas) de la Universidad de California (University of California Statewide Integrated Pest Management Program, 2010). Un plan de acción se incluyó al final de cada hoja con información práctica y fácil de seguir.

Tabla 1a
Juego de herramientas de IPM: contenido y resumen de materiales. Control integrado de plagas: currículo para programas de cuidado y educación infantil
Contenido # de páginas Resumen de materiales
Introducción 2
  • Resumen del contenido del juego de herramientas
  • Público meta
  • Objetivos de aprendizaje
  • Contexto: efectos en la salud, repaso del currículo
¿Qué es el control integrado de plagas (IPM)? 2
  • ¿Por qué usar el IPM?
  • Pasos a un IPM exitoso
  • Ejemplo de cómo usar el IPM
Ley de Escuelas Saludables 2
  • ¿Qué es la Ley de Escuelas Saludables (HSA)?
  • ¿Qué exige la ley?
  • ¿Quién es el responsable de ayudar a implementar la HSA?
Plagas—lo que debe saber 1
  • ¿Qué son plagas?
  • Peligros de plagas para niños pequeños
Pesticidas—lo que debe saber 3
  • ¿Qué son pesticidas?
  • Tipos de pesticida
    • ¿Dónde se usan pesticidas?
    • ¿Qué son los peligros para la salud?
  • Efectos agudos y a largo plazo
  • Por qué los niños están en más peligro
  • Otros peligros de usar pesticidas
  • Selección de pesticidas menos dañinas
Comprensión de prácticas de IPM 14
  • Prevención
  • Inspección
  • Identificación´
  • Monitoreo
  • Control
    • Almacenaje y desecho seguro de pesticidas
    • Cómo leer una etiqueta de pesticida
Implementación del IPM en su programa de ECE 3
  • Política escrita de IPM
  • Designación de coordinador de IPM
  • Capacitación en el programa de IPM
  • Información recogida de contratistas externos
  • Contratación de profesional del control de plagas con experiencia con IPM
  • Inspección de edificios y terreno para la fuente de infestaciones
  • Establecimiento de procedimientos de monitoreo de plagas
  • Identificación de plagas encontradas
  • Creación de plan de acción de IPM
  • Establecimiento de registro
  • Establecimiento de sistema de archivo
  • Establecimiento de área de información sobre el IPM en las instalaciones
  • Evaluación regular del programa de IPM
  • Requisito de atención y constancia en programas de IPM
Cómo contratar un profesional de control de plagas 1
  • Identificación de profesional de control de plagas con experiencia con el IPM
Glosario de términos 2
  • Definición de términos usados en el juego de herramientas de IPM
Recursos 1
  • Nombres y sitios web de materiales de IPM para programas de cuidado infantil
Apéndices 7
  • Lista de materiales complementarios del juego de herramientas de IPM
  • Formularios:
    • Muestra de la política de IPM para programas de ECE
    • Muestra de cartas que explican el registro anual del aviso por escrito, y aviso del uso programado de pesticidas
    • Solicitud para padres y empleados de inscripción en el registro de avisos
    • Muestra de cartel de aviso para exhibir en el sitio
    • Muestra del diario del monitoreo de plagas
Tabla 1b
Juego de herramientas de IPM: contenido y resumen de materiales
Materiales complementarios
Contenido # de páginas Resumen de materiales
Hojas informativas de plagas:
notas de salud y seguridad
22
  • Hormigas
  • Cucarachas
  • Limpieza verde
  • Piojos
  • Mohos
  • Mosquitos
  • Roedores
  • Desinfección segura y efectiva
  • Babosas y caracoles
  • Arañas
  • Avispas
Hojas informativas para familias 3
  • Hormigas y piojos
Carteles 4
  • Ambiente interior de cuidado y educación infantil
  • Ambiente exterior de cuidado y educación infantil
  • Cómo leer una etiqueta de pesticida
  • Pesticidas exentas y no exentas
Lista de verificación de IPM para programas de cuidado y educación infantil 10 Secciones:
  1. Instrucciones para la lista de verificación; herramientas útiles para una inspección de IPM; notas sobre la evidencia de plagas y el daño que causan
  2. Lista de verificación de 85 elementos, 3 secciones y subdivisiones según el lugar de observación:
    1. Áreas exteriores: almacenaje de basura, exterior del edificio, jardines y área de juego
    2. Áreas interiores: cocina, baños, espacio común y áreas de jugar, comer, almacenar y para empleados
    3. Uso de pesticidas y prácticas de IPM
  3. Explicación de algunos elementos de la lista de verificación de IPM; más detalles sobre la necesidad de inspeccionar áreas específicas

Evaluación del programa

Participantes. Los centros posibles fueron identificados de la base de datos de centros autorizados en California de la California Child Care Resource and Referral Network (Red de California de recursos y referencias del cuidado infantil). Los criterios de inclusión eran (1) centros que servían a niños principalmente minoritarios, de bajos ingresos y diversas edades, (2) centros que se esperaba que tendrían al menos 7 meses subsiguientes de operaciones, (3) centros que se encargaban de su propio desecho de basura, y (4) centros ubicados en las áreas de la Bahía de San Francisco y Los Ángeles.

Se reclutó una muestra de conveniencia de nueve centros autorizados de cuidado infantil ubicados en 6 de los 58 condados del norte y el sur de California. Siete centros eran del norte de California y dos eran del sur. Los nueve centros participantes servían a 854 niños menores de 6 años de edad y diversas herencias étnicas: el 60% de esta población era latina/hispana, el 20% era caucásica, el 8% era asiática, el 5% era africano-americana, el 4% era de otra herencia y el 3% era de etnia/raza mixta (Tabla 2a). El 77% de los niños que asistían a estos centros eran elegibles para subsidios del gobierno, entre ellos el programa de comida. Los administradores de los nueve centros tenían un promedio de 27 años de experiencia en ECE y un promedio de 11 años de trabajar en los centros de ECE participantes. Ciento siete empleados de ECE en ocho de los nueve centros asistieron a los talleres de IPM.

Tabla 2a
Características demográficas
(n = 9 centros, 854 niños)
Characteristic Percent N

Título del puesto del administrador

Director 56 5
Supervisor del sitio 22 2
Gerente de mantenimiento 11 1
Especialista en salud y seguridad 11 1

Nivel de formación académica del administrador

Licenciatura universitaria de 4 años 22 2
Maestría o más 78 7

Tipo de centro

Head Start 33 3
Particular, sin fines de lucro 33 3
Preescolar financiado por el estado 33 3

Herencia étnica de los niños

Hispana o latina 60 512
Europea-americana 20 171
Asiática o isleña pacífica 8 68
Africana-americana 5 43
Otros grupos 4 34
Etnias y razas mixtas 3 26
Niños que recibían subsidios del gobierno 77 657
Tabla 2b
Experiencia de los administradores
  Media (DT) N
Años de trabajo en el campo del cuidado infantil 25 (10) 9
Años de trabajo en este centro 15 (11) 9

Todos los procedimientos y formularios de consentimiento fueron aprobados por los Comités para la Investigación Humana de la Universidad de California en San Francisco y Berkeley. Se obtuvo el consentimiento informado por escrito de los administradores de centros de ECE que participaron en las entrevistas.

Formularios del conocimiento anterior y posterior a la intervención. Antes y después de cada taller, los empleados de centros de ECE llenaron el mismo formulario de 10 elementos del conocimiento anterior y posterior, en inglés o en español. Los elementos de opción múltiple incluían contenido sobre la definición del IPM, la vulnerabilidad de niños a pesticidas comparada con la de adultos, la Ley de Escuelas Saludables de California y las pesticidas aprobadas por la EPA (Agencia federal para la protección del ambiente) para el uso en el cuidado infantil (Apéndice).

Entrevistas con administradores. Se hicieron entrevistas con nueve administradores de centros antes de los talleres educativos de IPM y de 4 a 6 meses después de los talleres. Los directores de los centros identificaron a estos administradores como personas con la autoridad administrativa para supervisar las prácticas de IPM. Los administradores incluían directores de ECE (n = 5), supervisores de sitios (n = 2), gerentes de mantenimiento (n = 1) y especialistas en salud y seguridad (n = 1). Los datos recopilados incluían el título del puesto del administrador, su nivel de formación académica, el tipo de su centro y la información étnica de los niños que asistían a su centro. También se incluyeron preguntas cualitativas de respuesta abierta sobre la experiencia del administrador con el IPM, el impacto de los talleres de IPM y la utilidad del juego de herramientas de IPM. Se realizaron entrevistas cualitativas más profundas y se informa de las mismas en otro manuscrito. El entrevistador preguntaba: “Por favor, dígame cómo ha sido su experiencia al implementar el IPM en su programa de cuidado infantil. ¿Qué ha cambiado en su centro de cuidado infantil desde la asistencia de usted al taller de IPM, si es que algo ha cambiado? ¿Cree usted que dicho cambio sea suficiente, realmente beneficioso o irrelevante? ¿Cree usted que su centro está más capaz de tratar un problema con una plaga si es que ocurre?”

Lista de verificación de IPM. Desarrollamos una lista de verificación de IPM piloto de 72 elementos de observación para evaluar las prácticas en los programas de ECE del control de plagas, la evidencia de plagas o daños causados por plagas, y la integridad estructural de las instalaciones, tanto la exterior como la interior. La lista de verificación piloto fue desarrollada después de un repaso de otros recursos y listas de IPM basados en evidencia (entre ellos Bearer, 2000; Centers for Disease Control and Prevention, 2011; Fenske et al., 1990; Flint y Gouveia, 2001; Frumkin, Geller, Rubin y Nodvin, 2006; University of California Statewide Integrated Pest Managemente Program, 2010) y los requisitos de la Ley de Escuelas Saludables de California. La lista de verificación de IPM se usó en este estudio evaluativo y se revisó más tarde según nuestras experiencias durante el presente proyecto. La versión final de la lista de verificación de IPM incluida en el juego de herramientas de IPM tiene 85 elementos e incluye elementos de la entrevista piloto sobre las políticas escritas para el uso de pesticidas, los avisos a padres, sistemas de seguimiento y la desinfección (disponible en http://ucsfchildcarehealth.org/pdfs/Curricula/ipm/ipm_checklist.pdf).

Los miembros del personal que participaron en el presente estudio usaron la lista de verificación como parte de una inspección para evaluar las prácticas de IPM, el control de plagas y la presencia de plagas en el centro (Tabla 3). Se tomaron fotografías para documentar los problemas identificados y comparar las condiciones antes y después de la intervención. Los temas de las fotografías incluían áreas de almacenaje desordenadas, llaves de agua con fugas, agujeros en mosquiteros de ventanas y huecos entre caños y paredes, pero no se limitaban a estos temas. Los resultados de las listas de verificación y fotografías anteriores a la intervención se compartieron con los administradores de centros después de completarse los talleres de IPM.

Tabla 3
Frecuencia de elementos de la lista de verificación de IPM antes y después de los talleres
(n = 9 centros)
Elemento Antes del taller Después del taller
% sí    # sí / # centros % sí     # sí / # centros

Outdoor Areas

Almacenaje de basura: recipientes y contenedores

1. Cerrados correctamente 67% 6/9 78% 7/9
2. Colocados a 50 pies de puertas 89% 8/9 89% 8/9
3. Colocados en superficies duras que se pueden limpiar, como el hormigón 89% 8/9 100% 9/9
4. Área alrededor de recipientes y contenedores de basura libre de líquido o basura tirado 67% 6/9 100% 9/9
5. Todos los reciclables enjuagados o limpiados 71% 5/7 100% 9/9
6. Plagas (hormigas) 11% 1/9 0% 0/9

Exterior del edificio

1. Paredes, techo y cimiento libres de huecos o grietas 44% 4/9 78% 7/9
2. Molduras de ventanas libres de grietas 78% 7/9 89% 8/9
3. Ventanas se cierran correctamente 88% 7/8 100% 9/9
4. Mosquiteros de ventanas libres de daño (por ej., agujeros) 50% 3/6 89% 8/9
5. Conductos de ventilación y otras aberturas grandes protegidos con malla metálica < ¼ pulgada 33% 3/9 22% 2/9
6. Puertas exteriores con burletes, sellado o barreras similares 38% 3/8 78% 7/9
7. Plagas (otras—posiblemente termitas) 0% 0/9 0% 0/9

Jardines y áreas de juego

1. Plantas a 12 pulgadas o más del edificio 56% 5/9 67% 6/9
2. Ramas a 6 pies o más del edificio 89% 8/9 67% 6/9
3. Libre de hiedras y otras vides 67% 6/9 89% 8/9
4. Madera, escombros y abono denso a 6 pulgadas o más del edificio 89% 8/9 89% 8/9
5. Fuentes de agua (llaves o aspersores) no dejan agua estancada 100% 9/9 100% 9/9
6. Fuentes de agua libres de fugas o goteos 100% 9/9 100% 9/9
7. Equipos y juguetes libres de agua estancada 78% 7/9 78% 7/9
8. Recipientes exteriores de basura con tapas de cúpula 11% 1/9 11% 1/9
9. Recipientes de basura con forro interior de plástico 78% 7/9 100% 9/9
10. Si hay, trampas con cebo para roedores fuera del alcance de niños 0% 0/1 100% 1/1
11. Si hay, trampas para avispas alejadas de áreas de comer y jugar 0% 0/1 100% 1/1
12. Plagas (babosas y caracoles) 11% 1/9 0% /9

Áreas interiores

Cocina

1. Área cerca y debajo del lavaplatos limpia y seca 100% 7/7 89% 7/9
2. Área cerca y debajo del refrigerador limpia y seca 89% 8/9 100% 9/9
3. Superficies de muebles limpias y secas 100% 9/9 100% 9/9
4. Estantes, armarios y cajones limpios y secos 100% 9/9 100% 9/9
5. Comida guardada en recipientes bien tapados 71% 5/7 100% 9/9
6. Estufas libres de restos de comida, grasa y substancias azucaradas 100% 8/8 100% 8/8
7. Pisos y molduras libres de restos de comida, grasa y substancias azucaradas 100% 9/9 100% 9/9
8. Llaves de agua y tubería sin goteos o fugas 89% 8/9 100% 9/9
9. Huecos entre tubería, conductos de ventilación y paredes sellados o tapados con malla metálica 89% 8/9 100% 9/9
10. Grietas y huecos alrededor de armarios sellados o tapados 78% 7/9 89% 8/9
11. Recipientes de basura con forro interior de plástico 100% 9/9 100% 9/9
12. Recipientes de basura tienen tapas 89% 8/9 78% 7/9
13. Si hay, trampas con cebo para insectos fuera del alcance de niños 100% 2/2 100% 2/2
14. Si hay, trampas de monitoreo fuera del alcance de niños 100% 2/2 100% 1/1
15. Plagas (moscas, cucarachas) 22% 2/9 0% 0/9

Baños

1. Libres de moho 100% 9/9 100% 9/9
2. Paredes, pisos y mosaicos en buen estado sin grietas 78% 7/9 78% 7/9
3. Llaves de agua y tubería sin goteos o fugas 89% 8/9 89% 8/9
4. Huecos entre tubería, conductos de ventilación y paredes sellados o tapados con malla metálica 33% 3/9 56% 5/9
5. Grietas y huecos alrededor de armarios y espejos sellados o tapados 44% 4/9 67% 6/9
6. Plagas (hormigas) 11% 1/9 0% 0/9

Espacios comunes y áreas de jugar y comer

1. Muebles se mueven fácilmente para aspirar 100% 9/9 100% 9/9
2. Libres de desorden (por ej., cajas de cartón, productos de papel, juguetes y ropa de disfraz) 89% 8/9 89% 8/9
3. Libres de telarañas 89% 8/9 89% 8/9
4. Libres de polvo 100% 9/9 100% 9/9
5. Paredes y rodapiés libres de huecos 78% 7/9 78% 7/9
6. Artículos de comida para artes o artesanía en recipientes sellados 100% 9/9 100% 9/9
7. Recipientes de basura con forros interior de plástico 100% 9/9 100% 9/9
8. Recipientes de basura tienen tapas 89% 8/9 100% 9/9
9. Si hay, trampas con cebo para insectos fuera del alcance de niños 100% 1/1 100% 9/9
10. Si hay, trampas de monitoreo de plagas fuera del alcance de niños No aplicable   No aplicable  
11. Plagas (moscas x 2, palomillas—otras) 33% 3/9 0% 0/9

Área(s) de almacenaje

1. Limpias, organizadas y libres de desorden 89% 8/9 78% 7/9
2. Baldes enjuagados y trapeadores colgados para secarse 50% 3/6 57% 4/7
3. Limpias y libres de agua estancada o humedad 100% 9/9 100% 9/9
4. Grietas y huecos alrededor de armarios sellados o tapados 86% 6/7 100% 9/9
5. Artículos guardados en recipientes de plástico con tapas selladas si es posible 67% 6/9 78% 7/9
6. Plagas 0% 0 0% 0

Área de empleados

1. Libre de desorden (por ej., cajas de cartón o papel) 88% 7/8 89% 8/9
2. Libre de telarañas 100% 9/9 100% 9/9
3. Libre de polvo 100% 9/9 100% 9/9
4. Libre de recipientes de bebidas, migas o desechos 89% 8/9 100% 9/9
5. Grietas y huecos alrededor de armarios sellados o tapados 88% 7/8 100% 9/9
6. Recipientes de basura con forro interior de plástico 89% 8/9 100% 9/9
7. Si hay, trampas con cebo para insectos fuera del alcance de niños 100% 0/0 100% 2/2
8. Si hay, trampas de monitoreo de plagas fuera del alcance de niños 100% 2/2 100% 2/2
9. Plagas (ratón, cucarachas) 22% 2/9 0% 0/9

Talleres de IPM. Se dieron siete talleres en inglés y dos en inglés y español. Los talleres duraron un promedio de 1.5 horas y asistieron empleados y administradores de cuidado infantil; un taller incluyó principalmente empleados de limpieza y mantenimiento. Los talleres empezaban con un juego de IPM seguido de una presentación con diapositivas y experiencia práctica con varias herramientas de IPM. Se le dio a cada centro un juego de herramientas de IPM con trampas para avispas, estaciones de cebo, malla de cobre con que tapar huecos en paredes y alrededor de la tubería, etc., una pistola con calafateo con que sellar grietas, y un plumero para quitar telarañas y polvo en lugares difíciles de alcanzar.

Análisis

Computamos estadísticas descriptivas a fin de resumir las características de los centros, la experiencia de los gerentes, la frecuencia de los elementos de la lista de verificación de IPM que se observaron, la frecuencia de las políticas y los sistemas de seguimiento de IPM y los formularios del conocimiento antes y después de los talleres. Se utilizaron pruebas t para analizar el promedio del cambio de respuestas entre los formularios del conocimiento antes y después de los talleres. 

Resultados

Conocimiento antes y después de los talleres

Los formularios del conocimiento antes y después de los talleres (Apéndice) fueron llenados por empleados de ECE de 8 de los 9 centros (n = 107 participantes). Se incrementó significantemente el conocimiento de 2 de las 10 áreas de contenido que se evaluaron: el IPM y el uso de pesticidas (#6) y la Ley de Escuelas Saludables de California (#7). Hubo un incremento significativo del 70% al 84% de los participantes que dijeron que el IPM puede incluir el uso de pesticidas (estadística t (gl), valor p = -2.48 (196), p < 0.05). Hubo un incremento significativo del 21% al 44% de participantes que sabían que la Ley de Escuelas Saludables se aplica a los centros autorizados de cuidado infantil en California (estadística t (gl), valor p = 3.55 (194), p < 0.05). En general, no hubo ningún incremento ni decremento estadísticamente significativo del conocimiento en los resultados totales.

Lista de verificación de IPM

En contraste con los resultados de los formularios del conocimiento anterior y posterior, la lista de verificación de IPM mostró muchas mejoras de las prácticas de IPM, las condiciones de las instalaciones y la reducción de plagas en la inspección posterior en comparación con la anterior (Tabla 3). Hubo cambios positivos en 34 elementos; 5 elementos se hicieron peores, 32 elementos no tuvieron ningún cambio (21 se quedaron en el 100%) y 1 elemento no se evaluó. En resumen, hubo un incremento del 68% de prácticas de IPM (34 elementos de 50 mejoraron, que habían mostrado un cumplimiento de menos del 100% al principio). No se observó a ninguna plaga durante la inspección después de los talleres en ningún centro, en comparación con las inspecciones antes de los talleres (n = 10 plagas); durante las inspecciones iniciales se detectó la presencia de hormigas, babosas y caracoles, moscas, cucarachas, palomillas y ratones.

Las fotografías que se tomaron antes y después de las intervenciones documentaron que los problemas de la lista de verificación de IPM que se habían notado anteriormente se habían tratado. Las áreas de almacenaje estaban limpias y bien organizadas. Los huecos entre la tubería, conductos de ventilación y paredes estaban sellados. Los recipientes de basura fuera de los edificios se habían movido a superficies duras de cemento que se podían limpiar, y las molduras de ventanas estaban libres de grietas.

Políticas de IPM

Se incrementó el número de políticas escritas sobre el uso de pesticidas y prácticas de IPM entre los centros participantes después de los talleres. El 44% (n = 4) de los centros tenían políticas para la inspección después de los talleres, en comparación con el 11.1% (n = 1) al momento de la inscripción (Tabla 4). Además, los centros habían mejorado sus sistemas de seguimiento para el mantenimiento, la limpieza y la desinfección de sus edificios. Hallamos durante las inspecciones posteriores que los gerentes sabían qué era el IPM, y los programas ya tenían coordinadores de IPM designados.

Tabla 4
Frecuencia de políticas y prácticas de prevención de IPM. Entrevistas con administradores (n = 9)
Elemento Antes del taller
# de sí
Después del taller
# de sí

Políticas

Política escrita para el uso de pesticidas 1 (12.5%) 4 (44.4%)
Políticas escritas que incluyen el IPM 0 (0%) 4 (50%)

Sistema de seguimiento

Sistema de seguimiento para el mantenimiento del edificio 5 (55.6%) 8 (88.9%)
Sistema de seguimiento para la limpieza y desinfección 4 (50%) 6 (75%)
Sabe qué es el IPM 2 (22.2%) 9 (100%)
Coordinador de IPM designado 1 (12.5%) 5 (55.6%)
Intentó usar el IPM 4 (50%) 8 (88.9%)
¿Funcionó? 4 (66.7%) 8 (100%)
Pesticidas pulverizadas afuera dentro de los últimos 6 meses 4 (44.4%) 1 (11.1%)
Pesticidas aplicadas por “otro” 8 (100%) 0 (0%)

Entrevistas con administradores

Según sus respuestas a las preguntas abiertas, todos los administradores expresaron positividad en cuanto a sus experiencias con el IPM, el impacto de los talleres de IPM y la utilidad del juego de herramientas de IPM. Los administradores indicaron que el IPM se usaba con más frecuencia, e informaron de usar menos pesticidas durante los 4 a 6 meses después de los talleres de IPM. Sus reacciones incluyeron comentarios favorables de dos administradores: “Pienso que su taller fue muy efectivo. Creo que las personas que asistieron realmente lo agradecieron… Ustedes hicieron algunos juegos que hicieron participar a la gente… Fue muy interactivo e informativo”; “…Creo que (el IPM) es una idea muy buena porque te enfocas mucho en la limpieza y en usar cosas aparte de químicas o pesticidas para resolver el problema, así que estás viendo la integridad estructural de tus instalaciones y como (las plagas) tal vez se meten y yo pienso […] parece ser más seguro y mucho más efectivo cuando te enfocas así en vez de simplemente llamar a nuestro señor de plagas para que venga a resolverlo”.

Discusión

La intervención exhaustiva de IPM incrementó el uso de prácticas de IPM entre los centros de ECE participantes y redujo las infestaciones observadas de plagas. Los programas realizaron mejoras concretas de los ambientes físicos que redujeron la posibilidad de la entrada y el refugio de plagas en el futuro. Este hallazgo sugiere la importancia del uso en los programas de la lista de verificación de IPM, y recalca el valor de las evaluaciones o inspecciones completas para el aumento del uso de prácticas de IPM. Se combinaron la lista de verificación de IPM y la documentación fotográfica de los problemas con plagas y sugerencias específicas para tratar las deficiencias. Por lo tanto, se les había dado a los administradores de centros la información necesaria para dirigir a sus empleados, entre ellos los de mantenimiento y limpieza, para tratar los problemas indicados.

Se han utilizado listas de verificación de IPM en otras escuelas y en algunos programas de cuidado infantil (California Department of Pesticide Regulation, 2010; IPM Institute of North America, 2004, 2006; Maine Board of Pesticide Control, s.f.). Una evaluación basada en puntos de los programas IPM, la IPM STAR Certification for School Systems (Certificación STAR de IPM para sistemas escolares), fue desarrollada por el Instituto IPM (Green, Gouge, Braband, Foss y Graham, 2007); mostró una adopción incrementada de las políticas, los registros mantenidos, las prácticas de avisar y el protocolo para el uso seguro de pesticidas de IPM en 17 distritos escolares en donde inicialmente se hallaban deficientes en estas áreas. Sin embargo, el programa descrito en el presente artículo es el primero en documentar la eficacia de usar una lista de verificación como herramienta de evaluación para identificar las prácticas y políticas de la prevención de plagas, y el primero en evaluar el uso de un programa de capacitación en IPM para empleados de cuidado infantil.

Aunque el análisis de los formularios del conocimiento anterior y posterior no indicaba cambios positivos generales en las áreas especificadas en el formulario, los hallazgos de las entrevistas e inspecciones después de la capacitación sí indican que la capacitación de los empleados proporcionó una base de conocimiento que ayudó a los administradores que instruían a su personal a mitigar los problemas identificados. Aunque existe una tasa alta de movimiento entre el personal de la provisión directa del cuidado infantil, los administradores de centros de cuidado infantil tienden a tener una tasa más alta de estabilidad laboral (National Association of Child Care Resource & Referral Agencies, 2011; Whitebook et al., 2006). Esto sugiere que los administradores de cuidado infantil, quienes tienen la autoridad para implementar prácticas de IPM, son objetivos óptimos de la extensión y diseminación del juego de herramientas de IPM.

Nuestros hallazgos se comparan favorablemente con dos estudios similares de la intervención de IPM en programas de ECE: la intervención de IPM que se llevó a cabo en 892 programas autorizados de cuidado infantil en Illinois (Mir et al., 2010) y 45 centros en Nueva York (Anderson et al, 2010). Los dos programas de intervención de IPM incluyeron instrucción, sondeos y herramientas de IPM. Después de la capacitación en IPM, el personal de ECE de ambos estudios era más informado sobre el IPM y aplicaba más prácticas de IPM en comparación con los aerosoles de pesticidas.

Aunque nuestro proyecto piloto sacó varios resultados importantes, el presente estudio tuvo varias limitaciones. Reclutamos una muestra de conveniencia de centros autorizados, la cual incluyó a administradores motivados a quienes les interesaba el IPM. Por lo tanto, los resultados del estudio tal vez no se puedan generalizar para todo centro de ECE. También especulamos que el grado de lectoescritura de los elementos de los formularios del conocimiento anterior y posterior a los talleres quizás fuera demasiado alto, dado que los formularios indicaban cambios nominales de conocimiento a corto plazo, mientras que se evaluaron cambios substanciales de prácticas y políticas de IPM varios meses más tarde.

Una contribución importante de este estudio novedoso fue el uso de una lista de verificación estandarizada, observacional y objetiva, llenada por el personal de investigación. Esta inspección detallada incluyó fotografías específicas a cada centro que se les dio a los administradores de los sitios para documentar los problemas relacionados con plagas y facilitar su seguimiento de los problemas identificados. Se necesita más investigación en el futuro para determinar si las inspecciones realizadas por departamentos capacitados y locales de salud y las realizadas por proveedores de ECE tendrían resultados similares.

En resumen, hallamos que esta intervención exhaustiva y multifacética de IPM para administradores, proveedores y empleados de mantenimiento de ECE cambió actitudes, políticas de prevención, prácticas y control de plagas de IPM; por lo tanto, es probable que se haya reducido el uso de pesticidas y la exposición de niños y empleados a las mismas en los centros de ECE que participaron. Parece razonable concluir que la diseminación en el futuro del juego de herramientas de IPM a administradores de centros y empleados de ECE incrementaría el conocimiento y la aceptación de principios de IPM en la comunidad más amplia de ECE. La diseminación mediante grupos de profesionales de ECE, departamentos de salud y educación, y compañías particulares del control de plagas también aumentaría el uso de prácticas de IPM en programas de cuidado infantil.

Finalmente, se necesita más investigación a fin de perfeccionar y mejorar esta intervención exhaustiva de IPM. Una prueba aleatoria de control con una muestra más representativa de centros de ECE posiblemente puede mostrar que el juego de herramientas de IPM, los talleres educativos y la inspección con la lista de verificación de IPM pueden cambiar las prácticas del control de plagas. También recomendamos que los reglamentos de la autorización estatal del cuidado infantil incluyan las normas nacionales de los Estados Unidos para programas de cuidado infantil (American Academy of Pediatrics et al., 2011), las cuales apoyan el uso de prácticas de IPM y reducen así la exposición de niños pequeños y empleados a pesticidas además de apoyar ambientes saludables de cuidado infantil.

Reconocimientos

Los autores agradecen a los administradores, gerentes y empleados de cuidado infantil que participaron en el presente proyecto. Gracias al personal del proyecto —Robin  Brandes, Noa Kaplan, Alejandra Sosa Siroko, Casey Palmer, Anna Schwarzbach, Mark Robertson—, y al equipo administrativo de IPM y los crítico externos. El presente proyecto fue financiado por el Departamento de la Regulación de Pesticidas de California (Pest Management Alliance Grant; DPR Grant No. 08_PML_G002).

Referencias

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Información de los autores

La Dra. Abbey Alkon, R.N., P.N.P., Ph.D., es profesora en la Universidad de California, San Francisco, en la Facultad de Enfermería; también es investigadora para el Centro para Investigación Medioambiental y Salud Infantil de la Universidad de California, Berkeley. Desde 2001, la Dra. Alkon es directora del Programa de Salud en el Cuidado Infantil de California, organización comunitaria dedicada a mejorar la salud y seguridad de los niños que asisten a programas de cuidado y educación infantil. La Dra. Alkon es epidemióloga y enfermera pediátrica de práctica clínica avanzada, y ha realizado varios estudios comunitarios de enfermeros consultores de salud en el cuidado infantil que hacen intervenciones de salud en centros de cuidado infantil.

Abbey Alkon, R.N., Ph.D.
Professor, UCSF School of Nursing
2 Koret Way, Box 0606
San Francisco, CA 94143-0606
Teléfono: 415-476-4695
Fax: 415-753-2161 FAX
Email: abbey.alkon@nursing.ucsf.edu

Evie Kalmar tiene la maestría en ciencias y es estudiante de medicina en el Programa Conjunto de Medicina de UC Berkeley y UCSF. Recibió la licenciatura en química de la Universidad Bryn Mawr y dio clases de inglés como lengua extranjera como becaria del programa Fulbright en Taiwán. Completó su investigación para la maestría en UC Berkeley del proceso cualitativo para administradores de cuidado infantil con que apoyar un programa integrado nuevo del control de plagas en sus centros de cuidado infantil.

La Dra. Victoria Leonard, R.N., F.N.P. es especialista en el Instituto para la Salud y el Envejecimiento de UCSF, donde está trabajando en un segundo juego de herramientas de IPM que incluirá la limpieza y  desinfección ecológica para el cuidado y educación infantil. Es enfermera clínica especialista en la salud materna e infantil, y enfermera de práctica clínica avanzada que ha trabajado con niños en clínicas de atención médica primaria y especialidades secundarias. Era asociada de investigación que trabajaba en un estudio nacional de The Carnegie Foundation for the Advancement of Teaching sobre la formación en la enfermería. En 2009 se publicó Educating Nurses: A Call for Radical Transformation de Patricia Benner, Molly Sutphen, Victoria Leonard y Lisa Day.

La Dra. Mary Louise Flint es directora adjunta del IPM Urbano y Comunitario del Proyecto Estatal del Control Integrado de Plagas de la Universidad de California, y entomóloga de extensión del Departamento de Entomología de la Universidad de California en Davis. Su investigación se ha enfocado principalmente en las áreas del control integrado de plagas (IPM), el control biológico, la adopción y diseminación de prácticas alternativas del control de plagas y el control de plagas en los jardines. Es autora de más de 100 obras de investigación, publicaciones de extensión y libros relacionados con el IPM.

Devina Kuo tiene la maestría en salud pública y es especialista de programas con el Plan Care de Salud de Los Ángeles, donde administra el programa de los promotores de salud. Su experiencia con la salud comunitaria incluye investigaciones comunitarias participativas, la organización y construcción de comunidades, el desarrollo de currículos y la planificación y evaluación de programas. Antes de Care de Los Ángeles, la señora Kuo vivió varios años en América Latina como voluntaria con el Cuerpo de Paz, voluntaria de coordinación, investigadora de campo, educadora e intérprete. Cuando era estudiante graduada en la Universidad de California en Berkeley, era investigadora con CERCH y asistió con la creación el juego de herramientas de IPM y la instrucción de IPM para el personal de cuidado infantil.       

Apéndice
Formulario anterior y posterior al taller de IPM

  1. El control integrado de plagas (IPM) es un proceso que
    1. elimina rápidamente las plagas
    2. se enfoca en la prevención o supresión a largo plazo de problemas con plagas mediante la prevención, el monitoreo y el uso de los métodos menos tóxicos
    3. puede ser realizado solamente por una compañía particular del control de plagas
    4. no funciona tan bien como la aplicación regular de pesticidas realizada por una compañía particular del control de plagas
  2. Las pesticidas pueden tener efectos en la salud de niños, incluso
    1. el cáncer
    2. discapacidades de aprendizaje
    3. el asma
    4. todos los anteriores
  3. El monitoreo es un componente del IPM y requiere
    1. que se vigile a los niños para asegurar que no se acerquen a las áreas donde se han aplicado pesticidas
    2. que se observe a los niños para asegurar que no dejen comida en las áreas de afuera
    3. que se observe las instalaciones y el terreno del programa para encontrar problemas de plagas cuando son nuevos y más fáciles de tratar
    4. que se nombre a un coordinador de IPM que buscará plagas en el ambiente
  4.   Los niños pequeños son más susceptibles a los efectos de pesticidas que los adultos porque
    1. tienen sistemas inmunológicos que no está bien desarrollados y no los protegen totalmente de las químicas tóxicas
    2. se meten las manos y otros objetos a la boca con frecuencia
    3. están más cercas del suelo, donde las pesticidas se acumulan en la tierra
    4. todos los anteriores
  5. La Ley de Escuelas Saludables requiere que todos los centros de cuidado infantil
              de California
    1. dispongan una manera para los padres y empleados de inscribirse para que se les avise cada vez que el programa usa una pesticida
    2. pongan carteles de aviso en cada área en que se aplicará pesticidas
    3. lleven registros de las pesticidas usadas en el sitio durante los cuatro años más recientes
    4. todos los anteriores
  6. El control integrado de plagas (IPM) es un método que nunca utiliza ninguna pesticida.
    1. Cierto
    2. Falso
  7. La Ley de Escuelas Saludables se aplica en California a las escuelas K-12 y
    1. centros autorizados de cuidado infantil.
    2. hogares familiares autorizados de cuidado infantil. 
    3. centros de cuidado infantil, hogares familiares de cuidado y el cuidado informal.
  8. Una vez que la Agencia para la Protección del Medioambiente (EPA) apruebe pesticidas, no son peligrosas para nuestra salud.
    1. Cierto
    2. Falso
  9. ¿Cómo sabemos si es legal usar cierta pesticida?
    1. Si no huele demasiado tóxica cuando la pulverizo, entonces es legal y segura.
    2. Todas las pesticidas que puedo comprar en la tienda son legales y seguras.
    3. Veré el número de registro de la EPA en el recipiente.
    4. Todos los anteriores
  10. Las siguientes son estrategias del IPM para prevenir las plagas en el centro de cuidado infantil:
    1. Hacer el edificio a prueba de plagas y llevar una buena limpieza
    2. Usar pesticidas con regularidad
    3. Usar trampas con cebo con regularidad
    4. Todos los anteriores